La muestra ‘BERdeaPIZTU’ ya está en marcha en el Instituto de Arquitectura de Euskadi, en San Sebastián, hasta el próximo 18 de mayo, “naturalizando” el claustro de la casa de los arquitectos. Una exposición en la que se muestra la metodología llevada a cabo en el programa de naturalización de patios escolares de Donostia durante los últimos cursos de la mano de la sección de Parques y Jardines del Ayuntamiento de San Sebastián. La exposición está comisariada por los arquitectos Ula Iruretagoiena y Fermín Blanco, con la mirada de la fotógrafa María Azkarate. Las cajas modulares de la serie Home Box de Astigarraga Kit Line han servido de estructura soporte en el montaje y diseño de ‘BERdeaPIZTU’.
La propuesta BERdeaPIZTU es un programa desarrollado por el equipo de Sistema Lupo, cuyo arquitecto fundador es Fermín Blanco. Una propuesta que se enmarca en la estrategia transversal de transformación efectiva de ambientes del sistema público de la ciudad, y un proyecto educativo integral y experimental focalizado en el trabajo colaborativo y que favorece el espíritu de comunidad dentro de la escuela y su entorno. La vocación es repensar el espacio «verde» y «urbano» para incorporar a la concepción, diseño y mantenimiento otros parámetros y formas de hacer más acordes con las necesidades sociales, económicas y medioambientales actuales.
“La exposición BERdeaPIZTU muestra una narración visual, a través de las fotografías de María Azkarate, de las diferentes fases seguidas en la transformación de patios escolares en Donostia, en clave de naturalización”, explica Fermín Blanco. Esta muestra se complementa con información del proyecto Amara Berri-Urbieta y una pieza documental de Javier Maestre, “donde los diferentes agentes involucrados nos acercan a la historia”.
Muchas veces, los ojos ajenos pueden descubrir utilidades que nunca habías considerado, desbloqueando un potencial inexplorado en tus propios productos. ¿Y qué tiene que ver Astigarraga Kit Line en esta exposición? Nuestra empresa forma parte de lo que es el montaje y el diseño de la propia muestra. “Hemos querido naturalizar un espacio que no tiene naturaleza, que en este caso es un claustro histórico del siglo XVIII, el antiguo convento de las Teresianas. Un lugar simbólico por lo que supone como punto arqueológicamente caliente en el histórico de la ciudad de Donostia, y que desde hace unos años ha sido reconvertido en el Instituto de Arquitectura de Euskadi, una institución del Gobierno Vasco para promocionar la arquitectura contemporánea”, afirma Fermín Blanco.
“El claustro, que es posiblemente la joya de la corona, tiene una escala muy curiosa, pequeña y acogedora, y lo que hemos hecho es sellar la planta, tamizarla con un módulo que se va repitiendo con variantes, creado a partir de la modularidad de las cajas de madera de Astigarraga Kit Line”, explica el arquitecto, respecto a la utilización de las cajas Home Box. “Introducimos un nuevo material que es la madera en un ámbito de piedra, y conseguimos un doble efecto: por un lado, hacia el exterior, nos sirve como soporte para ajardinar el claustro y llenarlo de plantas, y por otro lado, hacia el interior para introducir todo el contenido de la exposición, que es un recorrido interior a lo largo del claustro”, añade.
“Como el claustro es una arquitectura muy modular y repetitiva donde hay tres huecos por cuatro lados, 12 huecos en total, lo que hemos hecho es ir reproduciendo y jugando con la idea del módulo. Casualmente coincide bien con los módulos de los huecos, haciendo variantes: colocándolas delante, detrás, sin cegar completamente el hueco y así permitimos la vista transversal cruzada interior/exterior, y también la ventilación porque las plantas son naturales”, concreta Fermín Blanco.
Cuando finalice la exposición, las plantas vivas procedentes del vivero de Putzueta serán plantadas en los patios y espacios públicos de la ciudad y nuestras cajas de madera tendrán una nueva vida como equipamiento en el colegio Gainzuri de Urretxu. Todo se transforma, todo se recicla. “Trabajar con materiales vivos en combinación con un soporte orgánico que es la madera y en contraste con la arquitectura del siglo XVIII dura, pesada y de piedra, es una parte importante. Esa combinación de materiales nobles es algo que también se ha tratado de jugar con el montaje y el diseño de la exposición”, señala el arquitecto fundador de Sistema Lupo.
“La madera es un material de presente y futuro”
Fermín Blanco va más allá y realiza un análisis de lo que significa el uso de la madera. “La madera es uno de los grandes materiales históricos y tradicionales que nos ha acompañado siempre en la historia de la arquitectura y que, además, es un material de presente y de futuro por todos los componentes que lleva asociados. Y si es una madera tratada, como lo hace Astigarraga Kit Line desde un control forestal; y si el producto final como es el caso del mundo que nos acoge que es un mundo de la auto construcción o del bricolaje, donde el cliente forma parte del montaje, ahí se aúnan todos los condicionantes que nosotros queremos tratar en nuestros patios. Es decir, naturalizarlos, trabajar con material orgánico y madera km0, y hacer partícipe al usuario, tanto en la toma de decisiones como en el propio montaje y fabricación y construcción de los patios”.
Complicidad entre todos los agentes
Además, el sistema Lupo es un proyecto realizado, en unas condiciones máximas de complicidad entre alumnado, claustros, familias, y administración con la coordinación docente a través de los centros de formación de profesorado. “Los patios, esos espacios de exterior de los centros educativos, suelen ser muy duros, hormigonados, muy cementados, grises, monocromáticos y monotemáticos, porque fundamentalmente están predominados por una única actividad, que es el espacio deportivo”, señala Fermín Blanco, a lo que añade que “hacemos que estos proyectos sean participativos, colaborando con los profesores, las comunidades educativas, las familias y los estudiantes para transformar los patios, complicándolos en cierta medida, introduciendo nuevas variantes, nuevos elementos de juego y sobre todo trabajando la superficie, rompiendo esos hormigones para que entre la naturaleza, el verde, otras texturas, la corteza, la grava, la hierba, la tierra, la arena. Es decir, estamos introduciendo una complicación en un escenario que era muy plano”.